Un reportaje de T13 reveló que el exjefe de turno de la DGAC en el Aeropuerto El Loa, Raúl Alarcón Hermosilla, mantuvo en una vivienda fiscal armas y droga, y permitió que residieran mujeres vinculadas a explotación sexual y trata de personas. La causa terminó con pena de 5 años de cárcel. El caso desató exigencias de control interno en el servicio.

CALAMA/ANTOFAGASTA — Un funcionario de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) que se desempeñó en el Aeropuerto El Loa fue condenado a cinco años de presidio tras acreditarse su relación con la organización criminal Tren de Aragua, según la investigación judicial difundida por un reportaje de T13. La indagatoria estableció que, en una casa fiscal asignada al funcionario, se almacenaban armas y se traficaban drogas, además de alojar por meses a tres mujeres vinculadas a explotación sexual y trata.
De acuerdo con los antecedentes exhibidos por el programa, Alarcón —quien tenía acceso amplio a dependencias aeroportuarias— conoció a una de las mujeres en locales nocturnos y la llevó a vivir a la vivienda fiscal, donde más tarde se sumarían otras dos. En ese domicilio también habría operado un delincuente venezolano apodado “El Chino”, identificado como integrante del Tren de Aragua, quien guardó armamento y fue detenido posteriormente mientras intentaba trasladar 150 kilos de droga; el sujeto enfrentaba además procesos por cuatro secuestros.
El caso encendió alertas por infiltración del crimen organizado en organismos del Estado. El diputado Sebastián Videla pidió una “limpieza total” en la DGAC: solicitó una reunión urgente con el director nacional del servicio, un listado de funcionarios que trabajaron con el condenado y la apertura de una investigación administrativa para establecer responsabilidades y cerrar posibles brechas de seguridad.
Extracto del Reportaje de T13: «Corrupción en la DGAC: El nexo del Tren de Aragua»
Desde el mundo parlamentario se evalúan acciones de fiscalización —incluida la opción de comisión investigadora— y un plan de revisión de accesos en recintos aeroportuarios de la región. En paralelo, fuentes del sector anticipan auditorías internas para reforzar controles, perfiles de riesgo y protocolos sobre uso de viviendas fiscales.
¿Qué falta?
La DGAC no ha detallado, al cierre de esta nota, medidas disciplinarias adicionales ni cambios en los procedimientos de acceso en el aeropuerto. Tampoco se informó si la defensa del condenado apelará la sentencia. La causa mantiene líneas abiertas respecto de cómplices y encubridores asociados a la red.