La infartante llave de cuartos de final se definió en Calama, donde los «Zorros» superaron la adversidad de ir dos veces abajo en el marcador. La figura heroica de Ethan Espinoza (Wanderers) se apagó ante el oportunismo de Álvaro Delgado y la atajada monumental del arquero Hugo Araya en los penales.

Tanda de penales Cobreloa vs. Santiago Wanderers | Cuartos de final Liguilla de Ascenso Caixun 2025

ESTADIO ZORROS DEL DESIERTO, CALAMA — domingo 23 de noviembre de 2025. En una tarde áspera, friccionada y marcada por el sufrimiento competitivo, Cobreloa escribió un triunfo que puede terminar definiendo su temporada: tras un empate 2-2 en el marcador, le ganó (4-3 en penales) a Santiago Wanderers, resistiendo los mejores pasajes del elenco Caturro y encontrando la diferencia en detalles mínimos —un penal oportuno, un gol en el último suspiro y la figura heroica de su arquero. El elenco loíno no brilló y se vio superado en largos tramos, pero volvió a imponer su sello de esta recta final: ganar incluso cuando no juega bien. En la Liguilla del Ascenso, no hay espacio para la estética. Solo para sobrevivir.


Tensión y un golazo caturro

El ambiente en el Zorros del Desierto fue de presión desde el arranque. Cobreloa sabía que no podía ceder terreno, mientras Wanderers llegaba con la misión de revertir el 2-2 de la ida, buscando un triunfo que se les ha negado históricamente en Calama.

El equipo de Domingo Sorace entró mejor, presionando alto y buscando la velocidad. Los loínos avisaron primero con un doble travesaño (Gotti y Muga a los 13′), pero la posesión y las mejores chances eran para la visita. Y fue el mejor hombre de la serie quien golpeó primero: a los 39 minutos, Ethan Espinoza se mandó un verdadero «golazo maradoniano», eludiendo defensas con pasividad, para definir con frialdad ante Hugo Araya para el 0-1.

Cobreloa sobrevivía sin encontrar conexiones, pero encontró un respiro desde el detalle: una falta de Diego Torres sobre Gotti dentro del área, revisada por el VAR. El juez cobró penal y, a los 45+4’, Aldrix Jara cambió la jugada por gol, cruzando el remate para el 1-1. Cobreloa se fue al descanso sin dominar, pero con ventaja. La sensación en el estadio era clara: el partido estaba lejos de estar cerrado.


El segundo tiempo: Reacción de fe y error fatal

El complemento comenzó con un trámite lento, pero la tensión no decayó. El partido se jugó trabado, hasta que un contragolpe fulminante de Wanderers volvió a estremecer el desierto. A los 80 minutos, Ethan Espinoza aprovechó una asistencia tras una gran jugada de Luna y anotó el 2-1, desatando la euforia en la banca caturra y el silencio en las tribunas.

La eliminación parecía un hecho. Cobreloa quedó sin respuestas, sin salida y sin energía.

Pero cuando el partido parecía sellarse, apareció la escena que definió la noche. A los 90 minutos, un potente remate de Cristian Muga fue mal contenido por el portero Eduardo Miranda, y el oportunista Álvaro Delgado, con olfato de gol, empujó el rebote para el 2-2 definitivo. Un error individual que costó la clasificación, forzando la definición desde los doce pasos.

El Cierre: Araya, el Héroe que no se Rindió

La tanda de penales fue puro nervio. El marcador se mantuvo apretado hasta el último lanzamiento.

El cierre fue puro sufrimiento: tras una falla por lado, se llegó al quinto penal. Con la cuenta 4-3 a favor de los loínos, el portero Eduardo Miranda asumió la responsabilidad del remate final. La cancha en Calama enmudeció. Miranda remató, y su colega, Hugo Araya, se vistió de gigante, conteniendo el tiro y sentenciando la victoria por 4-3 en la tanda.

Cobreloa no tuvo control ni comodidad en el juego, pero tuvo algo que pesa más en noviembre: oficio para resistir y un arquero que no se desordenó. Y eso, en la recta final de la Liguilla, vale un cupo en la semifinal contra San Marcos de Arica.

Charles Aránguiz celebra el gol del empate 2-2 ante Lanús por la semifinal de ida de la Copa Sudamericana en el Estadio Nacional.

Claves tácticas

Cobreloa (4-2-3-1):
Cobreloa salió con un esquema ofensivo, buscando la superioridad numérica en el medio. El equipo de César Bravo demostró por qué, aun sin dominar, es competitivo: incluso cuando perdió el control del mediocampo, nunca renunció a su estructura, sosteniendo el bloque con disciplina y apelando a la eficacia en los momentos límite. La línea de volantes, conformada por Navarrete y Muga, fue la base de la contención, aunque se vio superada por la presión alta caturra en varios pasajes. La amplitud fue dada por Jara y Valdés, buscando ensanchar la cancha y encontrar espacios para alimentar a Gotti (9) en punta, quien tuvo escasas oportunidades claras (doble travesaño al inicio). La clave fue la capacidad de reacción y el olfato de Álvaro Delgado (ingresado a los 64’ por Ledezma), quien se convirtió en el factor de la agonía y del empate. Cobreloa ganó desde el pragmatismo, la lectura emocional del partido y su capacidad para sobrevivir cuando el plan inicial se desarma.

Santiago Wanderers (4-2-3-1):
Santiago Wanderers planteó un partido lucido con el mismo esquema, buscando la presión alta y la transición rápida. El equipo de Domingo Sorace incomodó a Cobreloa desde la organización colectiva, con la doble contención de Navarro y Parra cortando líneas interiores para evitar que Cobreloa jugara cómodo. La línea de tres cuartos fue la clave ofensiva, liderada por Luna (10) como enganche y flanqueada por Ponce y Espinoza. Fue el trabajo de Ethan Espinoza por ese sector lo que transformó el encuentro, anotando un doblete letal. El plan se deterioró por el factor emocional: el equipo perdió coordinación defensiva y, tras el gol del empate de Delgado, se desordenó. El error individual del portero Eduardo Miranda y su posterior fallo en el penal definitivo sentenciaron un partido donde Wanderers compitió bien, pero falló en la templanza para sostener el plan en momentos críticos.

 

Ficha del partido

Cobreloa 2 (4) – 2 (3) Santiago Wanderers (Global 4-4)
🏆 Liguilla de Ascenso – Cuartos de Final Vuelta
📍 Estadio Municipal Zorros del Desierto, Calama (CHI)
🗓️ Domingo 23 de noviembre de 2025 – 18:00 hrs.
👤 Árbitro: Nicolás Gamboa

Alineaciones

Cobreloa (4-2-3-1)
DT: César Bravo
1. Hugo Araya;
17. David Tapia, 33. Gastón Heredia, 6. Nicolás Palma, 40. Ronald Guzmán (85’ 44. César Huanca);
23. Gerardo Navarrete (75’ 32. Sebastián Zúñiga), 21. Cristian Muga;
42. Aldrix Jara, 30. Iván Ledezma (65’ 22. Álvaro Delgado), 15. Alex Valdés (75’ 41. Branco Provoste);
7. Gustavo Gotti (C).
Suplentes: 31. Álvaro Salazar, 16. Patricio Romero, 24. Luis García.

Santiago Wanderers (4-2-3-1)
DT: Héctor Robles
1.Eduardo Miranda;
22. John Salas, 33. Marcos Velásquez, 4. Victor Espinoza, 6. Diego Torres;
5. Leandro Navarro, 16. Ricardo Parra;
14. Cristobal Ponce (46’ 8. Joaquín Pereyra), 10. Jorge Luna (88’ 26. Camilo Astroza), 30. Ethan Espinoza (84’ 3. Luis Miguel Margas);
9. José Pablo Monreal (76’ 27. Maximiliano Cuadra, 88’ 20. Joaquín Silva).
Suplentes: 40. Raúl Olivares, 13. Franco Cubillos.

⚽ Goles

39’ Ethan Espinoza (SW)
45+4’ Aldrix Jara (COB, penal)
80’ Ethan Espinoza (SW)
90’ Álvaro Delgado (COB)

🟨 Amonestados

  • 34’ Ethan Espinoza (SW)
  • 46’ Diego Torres (SW)
  • 53’ Cristian Muga (COB)
  • 63’ Gerardo Navarrete (COB)
  • 92’ César Huanca (COB)
  • 94’ Ricardo Parra (SW)

🟥 Expulsados

— No hubo (Solo el asistente técnico de SW).

⭐ Figura del Partido: Ethan Espinoza (Santiago Wanderers)
El volante ofensivo de Santiago Wanderers fue la verdadera estrella individual de la jornada. No importó el resultado final, el rendimiento de Ethan Espinoza en los 84 minutos que estuvo en cancha fue quirúrgico. Su carta de presentación fue su doblete, un registro perfecto al convertir en gol los dos únicos remates que realizó a portería. El primer tanto, de factura «maradoniana», fue la prueba de su capacidad de desequilibrio individual al completar sus dos regates intentados (2 de 2) con éxito. Además de su impacto goleador, fue un jugador combativo: ganó 9 de 19 duelos en el suelo, demostrando que su influencia iba más allá del área rival. Su precisión en el pase fue notablemente alta para su posición (76% de acierto), logrando incluso 7 recuperaciones de balón para iniciar las transiciones rápidas que tanto dañaron a Cobreloa. Espinoza fue el jugador que puso dos veces a Santiago Wanderers por delante en el marcador, y solo su salida (84’) precedió el colapso final de su equipo en los penales. Fue la estrella indiscutible de la cancha y el único responsable de que Cobreloa se viera forzado a la épica.

Cobreloa no clasificó por ser superior, clasificó porque Santiago Wanderers cavó su propia tumba deportiva en Calama; un partido áspero y sufrido que desnudó la fragilidad loína ante el único crack de los 90 minutos, Ethan Espinoza, quien con un doblete de antología (el primero, una carrera maradoniana, exponiendo la pasividad de la defensa en el 4-2-3-1 de Bravo) puso dos veces a Wanderers con la clasificación en el bolsillo. El fútbol no fue un acto de amor, fue un acto de fe, porque Cobreloa, sin juego ni ideas, encontró vida a través del penal oportuno de Jara y, en la agonía, por el error criminal de Eduardo Miranda en el 2-2 de Delgado, un fallo de concepto que condenó un año entero; y es que la mochila histórica de no ganar en Calama carcome el alma, llevando al propio portero a asumir el penal decisivo, donde Hugo Araya, que había mostrado dudas en el juego, se vistió de verdugo para atajar el tiro y sellar el pase. Hoy, el Zorro no enamora, solo sobrevive; pero en la Liguilla del Ascenso, donde la camiseta pesa más que el plan táctico, sobrevivir es ascender, y ahora, con más carácter que fútbol, les espera la batalla del norte contra San Marcos de Arica.

Próximos Desafíos

El camino de Cobreloa hacia el ascenso no da tregua y su próximo desafío es el Clásico del Norte contra San Marcos de Arica, una serie que inicia este miércoles 26 de noviembre con el partido de IDA a las 18:00 horas en el Estadio Carlos Dittborn, y que tendrá su desenlace definitorio el domingo 30 de noviembre con la VUELTA a las 20:30 horas, cuando el Zorro reciba la llave en Calama para buscar su paso a la final.